Descubre las razones detrás de las falacias más comunes

Las falacias son errores lógicos que se cometen al argumentar. Estos errores pueden ser intencionales o no, y pueden ser utilizados para persuadir a alguien de algo que no es cierto. Las falacias son muy comunes en nuestra sociedad y se utilizan en muchos ámbitos, como la publicidad, la política o el debate.

En este artículo, descubriremos las razones detrás de las falacias más comunes, para que puedas identificarlas y evitar caer en ellas.

¿Qué verás en este artículo?

Falacia ad hominem

Esta falacia se comete cuando se ataca a la persona que hace el argumento en lugar de refutar el argumento en sí mismo. Por ejemplo, si alguien argumenta que el cambio climático es real, y alguien responde diciendo que esa persona es un hippie que no sabe nada de ciencia, eso sería una falacia ad hominem.

La razón detrás de esta falacia es que es más fácil atacar a la persona que al argumento. Además, puede ser efectivo en persuadir a alguien que no está pensando críticamente.

Falacia de la generalización apresurada

Esta falacia se comete cuando se hace una generalización basada en una muestra demasiado pequeña o no representativa. Por ejemplo, si alguien argumenta que todos los hombres son infieles porque conocen a un hombre que lo es, eso sería una generalización apresurada.

La razón detrás de esta falacia es que es más fácil generalizar que analizar cada situación individual. Además, puede ser efectivo en persuadir a alguien que no tiene suficiente información.

Falacia de la falsa dicotomía

Esta falacia se comete cuando se presenta una situación como si solo hubiera dos opciones posibles, cuando en realidad hay más. Por ejemplo, si alguien argumenta que o estás con nosotros o estás contra nosotros, eso sería una falsa dicotomía.

La razón detrás de esta falacia es que puede simplificar la situación y hacer que la elección parezca más fácil. Además, puede ser efectivo en persuadir a alguien que no está pensando críticamente.

Falacia de la petición de principio

Esta falacia se comete cuando se da por sentado lo que se está tratando de demostrar. Por ejemplo, si alguien argumenta que Dios existe porque la Biblia lo dice, eso sería una petición de principio.

La razón detrás de esta falacia es que se evita tener que demostrar algo que es difícil de demostrar. Además, puede ser efectivo en persuadir a alguien que ya cree lo que se está tratando de demostrar.

Falacia de la falsa analogía

Esta falacia se comete cuando se hace una comparación que no es válida o relevante. Por ejemplo, si alguien argumenta que usar drogas recreativas es como saltar desde un puente, eso sería una falsa analogía.

La razón detrás de esta falacia es que puede hacer que algo parezca más peligroso o malo de lo que realmente es. Además, puede ser efectivo en persuadir a alguien que no está pensando críticamente.

Falacia del argumento de autoridad

Esta falacia se comete cuando se utiliza la opinión de una autoridad como prueba de algo, sin tener en cuenta si esa opinión es relevante o si la autoridad es realmente experta en el tema. Por ejemplo, si alguien argumenta que el cambio climático no es real porque un científico famoso lo dijo, eso sería un argumento de autoridad.

La razón detrás de esta falacia es que puede hacer que algo parezca más creíble de lo que realmente es. Además, puede ser efectivo en persuadir a alguien que no está pensando críticamente.

Falacia de la pendiente resbaladiza

Esta falacia se comete cuando se argumenta que una acción llevará inevitablemente a otra, sin tener en cuenta que puede haber otras variables que afecten el resultado. Por ejemplo, si alguien argumenta que si se legaliza el matrimonio entre personas del mismo sexo, pronto se legalizará la poligamia, eso sería una pendiente resbaladiza.

La razón detrás de esta falacia es que puede hacer que algo parezca más peligroso o amenazante de lo que realmente es. Además, puede ser efectivo en persuadir a alguien que no está pensando críticamente.

Falacia de la pregunta compleja

Esta falacia se comete cuando se hace una pregunta que presupone algo que no se ha demostrado. Por ejemplo, si alguien pregunta "¿Por qué odias a los animales?", presupone que la persona a la que se le está haciendo la pregunta odia a los animales.

La razón detrás de esta falacia es que puede hacer que la persona que responde se sienta atrapada. Además, puede ser efectivo en persuadir a alguien que no está pensando críticamente.

Falacia de la afirmación del consecuente

Esta falacia se comete cuando se argumenta que si algo es verdadero, entonces otra cosa debe ser verdadera también. Por ejemplo, si alguien argumenta que si una persona es rica, entonces debe ser feliz, eso sería una afirmación del consecuente.

La razón detrás de esta falacia es que puede simplificar la situación y hacer que el argumento parezca más fuerte de lo que realmente es. Además, puede ser efectivo en persuadir a alguien que no está pensando críticamente.

Falacia de la composición

Esta falacia se comete cuando se argumenta que la parte es igual al todo. Por ejemplo, si alguien argumenta que si todas las células del cuerpo son pequeñas, entonces el cuerpo en su conjunto debe ser pequeño, eso sería una falacia de composición.

La razón detrás de esta falacia es que puede simplificar la situación y hacer que el argumento parezca más fuerte de lo que realmente es. Además, puede ser efectivo en persuadir a alguien que no está pensando críticamente.

Falacia de la división

Esta falacia se comete cuando se argumenta que el todo es igual a la parte. Por ejemplo, si alguien argumenta que si el cuerpo en su conjunto es grande, entonces todas las células del cuerpo deben ser grandes, eso sería una falacia de división.

La razón detrás de esta falacia es que puede simplificar la situación y hacer que el argumento parezca más fuerte de lo que realmente es. Además, puede ser efectivo en persuadir a alguien que no está pensando críticamente.

Falacia de la causa falsa

Esta falacia se comete cuando se asume incorrectamente que una causa es responsable de un efecto. Por ejemplo, si alguien argumenta que el aumento de la temperatura es causado por el aumento de la actividad solar, eso sería una causa falsa.

La razón detrás de esta falacia es que puede simplificar la situación y hacer que el argumento parezca más fuerte de lo que realmente es. Además, puede ser efectivo en persuadir a alguien que no está pensando críticamente.

Falacia de la pregunta retórica

Esta falacia se comete cuando se hace una pregunta que no se espera que sea respondida. Por ejemplo, si alguien pregunta "¿Quién no estaría de acuerdo con esto?", eso sería una pregunta retórica.

La razón detrás de esta

Erika Martínez

Esta autora es una lingüista de renombre que ha trabajado en diversos proyectos académicos. Tiene una maestría en Lingüística y ha participado en el desarrollo de una variedad de trabajos enfocados en la investigación, el análisis y la aplicación de teorías lingüísticas. Sus contribuciones han ayudado a avanzar el campo de la Lingüística a pasos agigantados.

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