Descubre las 3 razones bíblicas sobre el diezmo en el Nuevo Testamento

El diezmo ha sido un tema controversial dentro de la religión cristiana, muchos se preguntan si es algo que todavía es necesario en el Nuevo Testamento. En este artículo, vamos a descubrir las tres razones bíblicas sobre el diezmo en el Nuevo Testamento.

¿Qué verás en este artículo?

Razón #1: El diezmo es un acto de obediencia y gratitud

En Mateo 23:23, Jesús reprende a los fariseos por su hipocresía en el diezmo, pero también dice: "Estas cosas debéis hacer, sin dejar de hacer aquellas". Es decir, Jesús está diciendo que el diezmo es algo que se debe hacer, pero no como una forma de ganar mérito o justificación ante Dios. En cambio, el diezmo debe ser un acto de obediencia y gratitud por todo lo que Dios ha hecho por nosotros.

En 2 Corintios 9:7, Pablo también habla sobre la actitud correcta al dar: "Cada uno dé como propuso en su corazón, no con tristeza ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre". El diezmo no debe ser algo que se hace por obligación o porque se siente forzado, sino que debe ser un acto de alegría y gratitud hacia Dios.

Razón #2: El diezmo es una forma de apoyar la obra de Dios

En el Antiguo Testamento, el diezmo se usaba para apoyar a los sacerdotes y levitas en su ministerio en el templo. En el Nuevo Testamento, aunque ya no se sigue el sistema del templo, el diezmo sigue siendo una forma de apoyar la obra de Dios en la iglesia.

En 1 Corintios 9:14, Pablo dice: "Así también ordenó el Señor a los que anuncian el evangelio, que vivan del evangelio". Es decir, aquellos que se dedican a tiempo completo a la obra de Dios deben ser apoyados por la comunidad de creyentes. El diezmo es una forma de hacerlo posible.

Además, el diezmo también se puede usar para ayudar a aquellos que están en necesidad dentro de la comunidad cristiana. En Hechos 4:34-35, se describe cómo los primeros creyentes compartían todo lo que tenían, y "no había entre ellos ningún necesitado". El diezmo puede ser una forma de seguir este ejemplo y ayudar a aquellos que necesitan apoyo financiero.

Razón #3: El diezmo es una forma de confiar en Dios y su provisión

En Malaquías 3:10, Dios dice: "Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde". Es decir, Dios invita a sus seguidores a probarlo en su provisión, y dice que si confiamos en él y le damos lo que le pertenece, él nos bendecirá.

En Mateo 6:33, Jesús también dice: "Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas". Es decir, si ponemos a Dios primero en nuestras vidas, él se encargará de proveer todo lo que necesitamos.

Dar el diezmo es una forma de confiar en Dios y su provisión, y de ponerlo primero en nuestras vidas. Cuando hacemos esto, podemos estar seguros de que Dios nos bendecirá y proveerá para nuestras necesidades.

Conclusión

El diezmo es un tema controvertido en la iglesia cristiana, pero estas tres razones bíblicas nos muestran que es un acto de obediencia y gratitud, una forma de apoyar la obra de Dios, y una forma de confiar en Dios y su provisión. Si bien es importante recordar que el diezmo no es una forma de ganar mérito o justificación ante Dios, sino una forma de expresar nuestra gratitud y confianza en él.

Preguntas frecuentes

1. ¿El diezmo es obligatorio en el Nuevo Testamento?

Aunque no hay una ley que obligue a los cristianos a dar el diezmo en el Nuevo Testamento, estas tres razones bíblicas nos muestran que es algo que se debe hacer por gratitud y apoyo a la obra de Dios.

2. ¿Hay un porcentaje específico que debemos dar como diezmo?

En el Nuevo Testamento, no se especifica un porcentaje específico para el diezmo. En cambio, se nos anima a dar con alegría y generosidad.

3. ¿El diezmo solo se puede dar a la iglesia?

No necesariamente. El diezmo se puede dar a cualquier organización o ministerio que esté haciendo la obra de Dios y ayudando a los necesitados.

4. ¿Qué pasa si no puedo dar el diezmo?

Dios no nos llama a dar más allá de nuestras posibilidades. Si no podemos dar el diezmo, podemos dar lo que podamos con alegría y gratitud.

5. ¿Puedo dar más del diezmo?

¡Por supuesto! Si Dios te ha prosperado y te sientes llamado a dar más allá del diezmo, es una excelente forma de apoyar la obra de Dios y ayudar a aquellos que están en necesidad.

Liz López

Es autora de varios libros de lingüística. Se graduó en la Universidad de Harvard con un grado de doctorado y trabajó como profesor de lingüística en varias universidades. Es autora de varios libros sobre lingüística moderna, incluyendo uno que se ha convertido en una referencia básica para el estudio de la lingüística. También ha publicado varios artículos en revistas académicas sobre temas relacionados con la lingüística.

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